El OPV 81 “Piloto Pardo” fue incorporado al servicio el 13 de junio de 2008, en una ceremonia efectuada en el Molo 500 de la Base Naval Talcahuano. Cinco años han pasado desde aquel momento y hoy, este buque, destaca por su exitosa participación en el ejercicio internacional Unitas y en la operación Jiatf-S, dos desafíos que enfrentaron con profesionalismo y dejando en alto el nombre de la Armada de Chile.

Para su Comandante, Capitán de Fragata Alberto Osorio, ser parte de esta experiencia permitió “crecer en el aspecto humano y profesional al haber enfrentado un desafío internacional de esta índole, entregando lo mejor de nosotros para acrecentar en el extranjero, la imagen, de nuestra Institución y del país”.

Unitas

Con el objetivo de realizar maniobras de entrenamiento marítimo junto a unidades representantes de las Marinas de otros países, el OPV 81 “Piloto Pardo” zarpó el 21 de agosto rumbo a “Unitas LIV”, fase Pacífico 2013, desde Talcahuano.

Luego de desarrollar actividades de coordinación y camaradería, se dio inicio a los entrenamientos, entre ellos: maniobras tácticas, operaciones aéreas, envío de señales, operaciones de interdicción marítima, de búsqueda y salvamento diurno y nocturno, y el ejercicio de tiro a un blanco, donde el “Piloto Pardo” acertó en su primera corrida, recibiendo las felicitaciones en la reunión final.

Para el Sargento 1° Juan Ponce “en Unitas pudimos interactuar con buques de diferentes países, efectuando ejercicios combinados, unificando procedimientos de manera fluida y expedita”.

Asimismo, el Cabo 1° Rubén Riquelme asegura que “la participación me permitió poner en práctica lo aprendido y ver la importancia de este ejercicio para lograr los objetivos deseados”.

Lucha contra el narcotráfico marítimo

Luego de su participación en Unitas LIV 2013, el OPV 81 “Piloto Pardo” fue designado para colaborar al Grupo de Tarea Intergubernamental para el Combate del Narcotráfico Estadounidense Jiatf-S (Joint Interagency Task Force South), patrullando activamente sectores asignados, ubicados en aguas internacionales dentro del Océano Pacífico, frente a costas de Centro América.

La Unidad debió realizar patrullajes de vigilancia marítimos y aéreos, con el Helicóptero N-53 clase Dauphin, y por estos medios controlar las distintas embarcaciones denominadas dentro de los sectores asignados, y así también reportar novedades a Jiatf-S en forma permanente.

El Marinero 1° Luis Reyes comenta que para él ser parte de esta experiencia fue súper enriquecedor: “he aprendido a conocer la importancia de la labor que desarrolla la Armada de Chile en ejercicios de cooperación internacional”.

Por otra parte, asegura que todo ha sido un mundo nuevo, ya que es su primer año de embarco: “me he sentido muy contento, útil y sobretodo he aprendido a trabajar en equipo”.

Intercambio de experiencias

Capitán de Fragata  Alberto Osorio.

Sin duda, participar de operaciones internacionales es una instancia para perfeccionarse y adquirir nuevos conocimientos, pero también una oportunidad para compartir con marinos de otros países.

El Comandante Osorio define la relación con las Armadas que participaron de los ejercicios en tres aspectos: “cercana, porque todo se desarrolló en un ambiente cordial de gran camaradería y respecto; directa, al plantear nuestros puntos de vista en forma oportuna y transparente; y profesional, como está acostumbrada nuestra Armada a operar responsablemente con otras Marinas”. A su vez, el Sargento Ponce reconoce que “los marinos chilenos, como los marinos de cualquier otro país, tenemos una gran similitud de vivencias, lo que nos permite relacionarnos de buena manera”.

Misma opinión tiene el Marinero Reyes, quien menciona que tanto Unitas como Jiatf- S “permiten conocer la forma de operar de otras Marinas y entablar lazos de amistad a través de las distintas actividades”.

La vida lejos de casa

Cabo 1º Rubén Riquelme.

Si bien el Cabo Riquelme define su desempeño a bordo del OPV “Piloto Pardo” como una experiencia de superación personal, asegura que el apoyo familiar es vital para desenvolverse plenamente en periodos de comisión. Asimismo, el Sargento Ponce asegura que el buque es muy versátil con grandes capacidades para desarrollar diversas tareas y sobretodo, capaz de desarrollar ejercicios de escenario conjunto con unidades de combate.

De igual manera, destaca la importancia de su núcleo cercano cuando se está fuera de casa, pues dice que la familia es el principal pilar en la vida de un marino: “su constante apoyo hace que la tarea sea más llevadera”.

El 7 de octubre, el OPV 81 “Piloto Pardo” recaló en Valparaíso. Luego de su experiencia en el extranjero, su Comandante plantea los nuevos desafíos para esta Unidad: “operar en nuestra Segunda Zona Naval en el apoyo a la comunidad, ejercer el patrullaje, vigilancia y control marítimo de aguas jurisdiccionales. Además, conformar la Fuerza Naval de Paz para el Ejercicio “Cruz del Sur” con Argentina, a desarrollarse en noviembre y diciembre de este año.

Por último, destacó el sello de su buque, afirmando que el “Piloto Pardo” se define por “cumplir todas las tareas que nos demande el Mando, con gran convicción, mucho entusiasmo y alto profesionalismo”.