Comodoro Sidney Chellew

El actual Director de Astilleros y Maestranzas de la Armada (ASMAR), es el Comodoro Sidney Chellew, quien comentó que el mayor desafío para la empresa este 2017 es el inicio de la construcción del Rompehielos.

"Estamos muy ávidos a recibir el definitivo visto bueno para el trabajo que ya se inició hace mucho tiempo, con la definición primero de quien iba hacer el diseño, con la ingeniería básica, la cual estamos revisando en visitas periódicas y también en reuniones con una empresa canadiense. Una vez firmado el decreto, iniciaremos los trabajos de planificación de detalles; conformado éste, se firma el contrato entre ASMAR y la Armada, para seguir el proyecto, cuyo timing sea de 4 a 5 años", comentó el Comodoro.

En ese contexto uno de los principales desafíos que ha debido y tiene que enfrentar ASMAR es la modernización y modificación del Astillero en Talcahuano, "principalmente para mejorar en tecnología y también lo que es capacidad de levante, es decir, todo lo que es grúa", afirmó el Comodoro Chellew. Asimismo, agregó entorno al Rompehielos que "el buque nace de una plancha de acero y va corriendo por un layout, hasta llegar a la grada de lanzamiento en forma de bloque donde se unen junto a su quilla, nosotros tenemos contemplado para el 2020 lanzarlo al agua y de ahí viene todo un período de año y medio o dos, en que se hacen todas las terminaciones".

Reliquias históricas

Durante las primeras semanas de marzo llamó la atención ver a dos buques cuyos nombres se hermanan en el Combate Naval de Iquique y ahora están en un periodo de reparaciones, Hablamos de la "Esmeralda" y el "Huáscar".

"El trabajo específico que se está realizando con el Huáscar, es cambiar las planchas que están en mal estado, que están adelgazadas por el paso del tiempo y el óxido, y así renovar partes del buque para que vaya manteniéndose en buen estado. La tecnología que existía cuando fue construido y cuando llegó a las aguas del Pacífico, consistía en unir planchas en base a remaches. Era el buque más moderno que existía, sin embargo, actualmente no se ocupa, pero si mantenemos el espesor de la plancha que hoy en día se trabaja con soldadura, lo que permite mantener la fisionomía del buque", explicó el Comodoro Chellew.

Mientras que la Esmeralda llegó el 8 de enero de su último viaje de instrucción y el 1 de abril debe estar en Valparaíso para recibir a los nuevos grumetes. Para ASMAR, en palabras de su Director, "es una embarcación que nos genera un desafío sumamente importante, porque siempre es un trabajo apurado, con poco tiempo y tiene que salir en la fecha, por lo tanto, es un desafío primero que nada de planificación, segundo en logística y tercero, la seguridad con la que tiene que salir ese buque a crucero que lleva a las valiosas nuevas generaciones de guardiamarinas y grumetes", concluyó.