Stella Maris

Educar desde el amor, Hogar Naval Stella Maris

Imagen foto_00000001Año tras año, desde 1960, el mes de agosto es asociado en la cultura argentina con los niños. La promoción para la protección de sus derechos se hace visible en campañas que ponen de manifiesto la convención establecida por la Organización de las Naciones Unidas.

En este marco, hay quienes trabajan en silencio los 365 días del año, atentos a respetar y hacer respetar la "Declaración de los derechos del niño, niña y adolescente". Entre ellos se encuentra cada una de las 71 personas del Hogar Naval "Stella Maris" que como todos los años organizaron nuevamente una jornada para homenajear a los más pequeños. Juegos, música, risas y colores inundaron el patio del predio ubicado en el barrio de Flores que, durante tres horas, fue el escenario de un evento en donde compartir se convirtió en la clave.

Grandes y chicos se divirtieron con cinchadas, "poner la cola al chancho", carreras de obstáculos y fútbol. Momentos que se sucedieron uno tras otro y que según los responsables de los juegos, eran "pequeños actos de amor". Con respecto a esto, la Trabajadora Social Cecilia Cano, quien forma parte de la dirección del Hogar, explicó: "Si no estuviéramos enamorados de este trabajo, no podríamos mantenerlo".

La matrícula actual de la institución es de 86 niños de entre 4 y 18 años, de los cuales sólo el 30 por ciento se encuentra bajo el régimen de convivencia. Todos concurren a los niveles escolares correspondientes y luego reciben apoyo en materias específicas según las necesidades que detecte el equipo interdisciplinario que los acompaña en el cotidiano. También tienen la posibilidad de participar en diferentes talleres optativos, como por ejemplo el de huerta, estímulo a la creatividad, cocina, entre otros.

La obra del Hogar Naval tiene como eje de trabajo la familia; ése es el horizonte hacia el que orientan todos sus esfuerzos tanto el personal militar como el civil que acompaña a los chicos que hoy dan vida a la institución. Estos últimos son pequeños futuros hombres y mujeres que algún día egresarán, pero que difícilmente olviden aquello que material y emocionalmente fue su hogar; así lo expresan los integrantes de la Asociación de Ex -alumnos.

"Sinceramente el Hogar representa mucho, tanto para mí como para mi familia. Nos brindaron ayuda, contención, construimos amistades; en pocas palabras nos acompañaron a crecer como personas y en nuestros vínculos", cuenta el Guardiamarina en Comisión Cristian Cussi. Él vivió junto a dos de sus cinco hermanos en la institución y hoy se encuentra realizando el Viaje de Instrucción a bordo de la fragata ARA "Libertad".

Desde esta obra dependiente de la Dirección de Bienestar de la Armada Argentina se trabaja para que los niños no pierdan la oportunidad de ser niños. Se los acompaña en su tránsito por la escuela y se celebran cada uno de los cumpleaños; también se invita a las familias para que sean parte presente, activa y contenedora en la educación de sus hijos.

Educar en valores es, en cierta manera, educar para el futuro, explica la Jefa de la División niño, niña y adolescente, Liliana Deus. Y acompañar en la construcción de un futuro, es el gran acto de amor que cada ex alumno del Hogar Naval Stella Maris recuerda y lleva consigo para siempre.