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Viviendas Fiscales
Mejorando en conjunto la calidad de vida de la Familia Naval
Anualmente el Servicio de Bienestar Social desarrolla una incesante labor para la mantención del par- que habitacional fiscal, con el propósito de mejorar la seguridad de los inmuebles y, por ende, la calidad de vida del personal naval y sus familias. Sin embargo, esa tarea no es posible sin la colaboración de los propios moradores, que tienen una responsabilidad ineludible con la mantención y preservación de este gran esfuerzo Institucional.
Las viviendas fiscales están emplazadas en diferentes zonas del país, afectadas por: condiciones climáticas, rotación del personal residente y características estructurales, que inciden y afectan su materialidad y, por ende, la calidad de vida de la familia naval.
Con el propósito de cumplir con la misión de entregar una vivienda fis- cal adecuada y de calidad, el Servicio de Bienestar Social ejecuta anual- mente, a través de personal técnico de los Departamentos y Delegaciones de Bienestar Social, programas de mantenimiento mayor y menor que buscan mejorar la condición estructural de las viviendas del parque habitacional y efectuar la normalización de las instalaciones de electricidad y gas.
Estas acciones se ejecutan tras un proceso de evaluación que considera los aspectos técnicos del estado de su materialidad, abarcando criterios como: seguridad, hermeticidad, confortabilidad y estructura, con el propósito de disponer de una visión general del estado del parque fiscal que permita planificar los esfuerzos, establecer prioridades y orientar la asignación de los recursos.
Programa de mantenimiento y de reparaciones generales
A partir del 2016, la Dirección de Bienestar Social se propuso incrementar los trabajos de recuperación de las casas que componen el par- que habitacional más antiguo, lo que significó reacondicionar 105 casas con una inversión superior a los 2.600 millones de pesos.
Asimismo, aumentaron los recursos destinados a los trabajos en las redes de gases de casas y departamentos, orientados a mejorar los estándares de seguridad de las viviendas. Es así como el 2017 se emplearon más de 260 millones de pesos para avanzar tanto en la certificación de los departamentos fiscales como en las pruebas de hermeticidad de las casas, principalmente de aquellas construidas bajo la norma antigua.
Deberes y obligaciones
Todos los beneficiados con la asignación de vivienda fiscal tienen una responsabilidad ineludible con la mantención y preservación de este gran es- fuerzo Institucional.
Es así como una vez que el servidor recibe la vivienda fiscal debe cumplir una serie de disposiciones que se encuentran estipuladas en las normativas aplicables a la ocupación de vivienda fiscal, que se preocupan de velar por aspectos relacionados a la seguridad de los inmuebles y, por ende, del cuida- do de las familias que allí habitan.
Por ejemplo, la Dirección de Bienestar Social debe dirigir y supervisar los procesos de mantenimiento mayor de las viviendas por intermedio de los respectivos Departamentos y Delegaciones de Bienestar Social, siendo obligación de los moradores mantener una vez al año, y a su cargo, los artefactos a gas como calefón, estufas, cocina, entre otros, sean o no de propiedad fiscal.
Algunos deberes relevantes de los moradores:
1. Entregar en las respectivas alcaldías, copias de las boletas y/o certificado de mantenimiento efectuado para su ingreso a la carpeta de vivienda.
2. Supervisar que las acciones de mantenimiento sean efectuadas por las personas y/o empresas que cuenten con la certificación emitida por la Superintendencia de Electricidad y Combustibles (SEC).
3. No utilizar ni tener balones de gas en viviendas habitacionales colectivas (departamentos). Por ejemplo, los de uso en cocina y calefacción (estufas).
4. No obstruir y/o modificar los accesos de ventilaciones de cocinas y logias (celosías).